Un día, Diminuta aparece en el bosque. El caracol, las mariquitas, las hormigas, el cienpiés y muchos otros, la miran y la miran. No se sabe de dónde viene, ni quén es, pero lo que más les asombra es que no se parece en nada a ninguno de ellos, sin embargo...
En la tarde calurosa, cerca de la acequia, dos amigas juegan y crean su propio mundo.
Rema que rema, la rana Rosita, rumbea el río, canoa chiquita.
Un libro con muchas erres para cantar, jugar y remar.